“Creo fervientemente en buscar y tratar de mantener una manera de jugar. Los técnicos que cambiamos mucho dejamos de ser creíbles”.
Almeyda
“Siempre quise imponer una idea de juego porque me gusta esa idea determinada. Pero si en el futuro me toca ir a un club de menores pretensiones, tendré que adaptarme. Me lo volcó mi carrera como jugador. Jugué en equipos chicos, con necesidad de sumar para no descender, y en otros más grandes donde encima pude ser protagonista”
Almirón
“Cuando un técnico tiene la posibilidad de elegir el plantel, es el ideal. Y yo arranqué con el ideal en Central. Dentro de las posibilidades seleccioné los futbolistas justos para lo que pretendía. Pero si heredara los jugadores y fuesen distintos, no sería necio y cambiaría. Como sea, la principal búsqueda debe ser la misma: generar bastante y que nos generen poco”.
Coudet
“No creo que el entrenador deba amoldarse a sus jugadores. Los jugadores deben amoldarse a nuestro trabajo. Después, en las características de ellos estarán los matices del equipo”.
Retegui
“Estoy convencido de que los técnicos debemos intentar que nuestro equipo siempre busque jugar. Aunque obviamente pasa por una cuestión de gustos. Y de eficacia. Porque yo no pido salir jugando por moda”.
Holan
“El estilo siempre tiene que ver con qué tipo de jugadores hay. Los técnicos deben partir de eso. Por eso Sabella es el mejor: fue campeón con planteles de distintas características”.
Desábato
“A veces no es tan importante la posesión. A mí me gusta ganar como el Barcelona y también como el Atlético Madrid”.
Mohamed
“Para mí todos los técnicos competitivos tienen mucho en común: la planificación, la intensidad, los detalles. Esto incluye a Guardiola y a Mourinho. Después están los matices: presionar, salir jugando y tantos otros. Fui parte del Barcelona el día que el Inter nos eliminó en la Champions. Hicieron lo que les convenía. Jugaban con 10, el Barcelona era un equipo que sometía a los rivales desde la posesión y ellos tenían el resultado a favor. Hay que darles méritos a los que defienden bien”.
Milito
“Cuando el equipo está consolidado, se pueden encontrar los once de memoria. Mientras, las modificaciones son necesarias. Cuando los jugadores se conocen, el equipo ya tiene su autonomía. En el Newell´s del Tata (Martino), en el primer año le dábamos valor al rival, pero hubo un momento en que dejamos de hacerlo y le pregunté por qué. ‘Ya estamos en otra etapa’, me dijo. Al final de un ciclo que duró un año y medio, nos fijábamos sólo en nosotros. Y tenía razón: cuando sentís a tu equipo sólido, te enfocás más en el daño que podés hacer que en el que te pueden hacer”.
Bernardi